- El proyecto de decreto obliga a emisoras estatales a migrar a tecnología digital, fija metas de cobertura y establece plazos de transición para el sector autonómico y local.
El Ejecutivo Central ha iniciado el plazo para someter a audiencia pública el texto del proyecto de real decreto destinado a impulsar la radio digital terrestre en España mediante la tecnología DAB+ (Digital Audio Broadcasting Plus). El trámite estará abierto hasta el 4 de noviembre de 2025, permitiendo que organizaciones sectoriales, operadores y ciudadanos presenten alegaciones al texto presentado por la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales.
Según el documento, la reorganización no generará nuevos canales, sino que busca optimizar la estructura actual para mejorar la calidad del servicio y la cobertura.
“Esta iniciativa representa un paso clave hacia la modernización del sector radiofónico español. La tecnología DAB+ permite un uso más eficiente del espectro radioeléctrico y optimiza la codificación de la señal de audio, haciéndola más robusta ante interferencias”, ha informado el Ministerio para la Transformación Digital y la Función Pública.
Además, desde el departamento que dirige Óscar López, destacan que la mayoría de los receptores modernos ya incorporan esta tecnología, y recordó que la normativa europea obliga a que todos los vehículos nuevos comercializados en la Unión Europea cuenten con radios compatibles.
Según el proyecto normativo, las emisoras de ámbito estatal deberán migrar de forma obligatoria y sincronizada a DAB+. En concreto, RTVE recibirá un bloque de frecuencias exclusivo con capacidad para emitir hasta doce emisoras y desconexiones provinciales, debiendo alcanzar una cobertura del 85 % de la población en 24 meses desde la entrada en vigor. En fases iniciales, se exige alcanzar el 50 % de cobertura en los primeros tres meses, y el 70 % al año.
Para el ámbito autonómico y local, la transición se plantea en dos fases: primero, de manera voluntaria y progresiva por parte de los radiodifusores que lo deseen, siempre que no dañe a otros operadores; luego, en una fase obligatoria que cada comunidad autónoma deberá coordinar y fijar cronograma. Este enfoque busca respetar las particularidades territoriales y evitar solapamientos. Mientras tanto, las emisiones analógicas en FM y onda media seguirán vigentes y no se derivarán concursos adicionales para licencias nuevas.