Tras varias semanas de negociación con Javier Godó, presidente del periódico La Vanguardia, sus trabajadores han decidido sumarse a la oleada de protestas que inunda el sector de la prensa diaria. Actualmente se trata de un descontento a nivel general como consecuencia de la precarización del sector. Es por este motivo que casi todas las redacciones de nuestro país desde hace dos meses se han unido a la celebración de lo que se conoce comúnmente como «miércoles negros».
Si bien es cierto que las reivindicaciones de cada una de las redacciones son diversas, todas reman en pro de un mismo objetivo, como es la mejora de las condiciones del sector. En el caso de La Vanguardia las protestan persiguen el aumento del salario en un 3%. Por otro lado, se aspira a sufragar los recortes de plantilla de los últimos años, así como amortiguar las consecuencias devastadoras de la subida del IPC. A pesar de que ha habido semanas de negociaciones con el presidente de la entidad sobre estas cuestiones, no se ha alcanzado acuerdo alguno hasta el momento.
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