La pasada semana, Madrid se convertía en anfitriona de la V Edición del Congreso Internacional de Editores de Medios Unión Europea-América Latina. Un encuentro con más de 40 profesionales de los medios de comunicación, donde se debatió y reflexionó sobre la realidad y problemáticas del sector.
Tras la conclusión de estas mesas de debate, todos los participantes y organismos se reunían para firmar la ‘Declaración de Madrid’, donde queda expresa la disposición de los profesionales a seguir contribuyendo al bienestar sociocultural y económico dentro de su rango de actuación.
De tal forma, la disposición de la ‘Declaración de Madrid’, reza así
1. DEFENSA DE LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN Y DEL DERECHO A LA INFORMACIÓN.
– Ante los reiterados ataques sufridos por los profesionales de la comunicación, tanto en América Latina Caribe, como en la Unión Europea, nos reafirmamos en la defensa de los Derechos a la Información y a la libertad de Expresión como universales e inalienables.
– La comunicación es vanguardia global y ha de responder en tiempo real a las demandas de transformación y adaptación económicas, empresariales, sociales o tecnológicas, manteniendo sus principios de defensa de la democracia, las libertades, singularmente las de opinión y/o expresión, igualdad o Justicia, y en general, de todos los Derechos Humanos.
2. LA LABOR DEL PROFESIONAL DE LA COMUNICACIÓN.
– Defendemos la comunicación como un bien social, caudaloso en sus aportaciones: fuente de información, creación de opinión autorizada y referencia de la realidad.
– Hay que reclamar un espacio de respeto para el periodista basado en la libertad. Somos los profesionales los más adecuados para canalizar la información, respetando las opiniones e informaciones emanadas de cualquier entidad, administración o ciudadano, siempre que se atengan a criterios de verdad, contraste, intenciones claras y capacidad comunicativa.
– De acuerdo con la línea marcada por diversas Asociaciones de Prensa internacionales, se suscribe la defensa del “llamado ecosistema digital” del periodismo profesional, el único que asegura la responsabilidad ante terceros, el contraste de las noticias y la rectificación de los posibles errores, así como el secreto de las fuentes.
3. RECONOCIMIENTO A LOS PROFESIONALES EN RIESGO.
– El Congreso homenajea a los compañeros que han muerto en el ejercicio de su profesión, singularmente de aquellos que informaban en zonas de conflictos armados o sociales, así como a todos aquellos que deben realizar su trabajo en situaciones de riesgo para su persona.
– Con base en lo anterior, condenamos aquellos Estados que fallan en garantizar el ejercicio de la libertad de expresión y el derecho a la información permitiendo que, a través de un evidente abuso del sistema de justicia, se castigue de forma desproporcionada a los periodistas con la penalización de los delitos de calumnia e injuria.
4. EL COMPROMISO SOCIAL DE LA PROFESIÓN PERIODÍSTICA.
– La comunicación profesional e independiente es esencial para la sociedad, coadyuva a la democracia, a la libertad, a la legalidad, a la igualdad, a la convivencia y al bienestar social. Es pilar fundamental del Estado de Derecho y de las sociedades democráticas. Asimismo, se muestra aliada de la Justicia y de la separación de poderes.
– Los medios han de tener una especial sensibilidad con los contenidos de carácter social, como complemento de los temas políticos y económicos. Por eso, nos comprometemos con la articulación social, el bien común, la lucha por la igualdad, la defensa de los maltratados, desvalidos, discapacitados y desposeídos, muy singularmente de los refugiados. Debemos denunciar a los poderes causantes de persecución ideológica y a las dictaduras, en general, como garantía de equilibrio e imparcialidad. Del mismo modo, no podemos ser ajenos al compromiso con la paz y con la defensa del medio ambiente.
– Reafirmamos el inequívoco apoyo de los medios para auspiciar y apoyar las manifestaciones artísticas en ámbitos como la escritura, la pintura, la escultura, la música, la televisión, el cine, la arquitectura, la fotografía y, en general, a todos los campos de creación cultural.
5. LA INFORMACIÓN EN EL MERCADO DIGITAL.
– Los medios de Europa-América Latina y Caribe gozan de un mercado genuino en el que seguir desarrollándose y de una inequívoca vocación de competir en el ámbito mundial. Lo hacen desde una perspectiva de colaboración con la defensa del patrimonio individual y colectivo, local y universal, rico y diverso.
– Ha de tenerse presente que con el sector de la comunicación convergen otros de la importancia de las telecomunicaciones o el informático, con los que ha de procurarse acuerdos para responder con éxito a las demandas del mercado del desarrollo multimedia y la distribución múltiple de los productos.
– El ámbito económico de la comunicación representa uno de los segmentos económicos con mayores posibilidades de crecimiento y, consecuentemente, de incidencia en la creación de riqueza y empleo. .- Las empresas de comunicación son un negocio con una cuenta de resultados. Han de asegurar una financiación suficiente y transparente, clara, ajustada a las leyes económicas y comerciales de cada país, y han de respetar los derechos laborales para todos sus trabajadores.
6. LA BATALLA CONTRA LA DESINFORMACIÓN.
– La proliferación exponencial de las llamadas “Fake News”, nos sitúa ante el riesgo continuo de la desinformación, con el consiguiente peligro para el derecho a la información y la estabilidad institucional de la democracia. En esta situación hemos de combatir las verdades construidas, la propaganda, etc.- Hay que refutar bulos, famas elaboradas desde la perversidad, acciones contrarias a la democracia. Hay que estimular la prevalencia del interés general.
– El incuestionable interés público del sector adquiere un valor esencial en un momento de sobreabundancia de informaciones sin origen conocido, malintencionadas, interesadas y que en muchos casos suponen daños irreparables para las personas, los colectivos sociales, incluso para los países. La relevancia en la claridad de las líneas editoriales y en las firmas son un instrumento de posicionamiento y el único aval de la información veraz.
– Sin embargo, la desinformación se convierte en una suerte de oportunidad para los medios de comunicación capaces de ofrecer información veraz y verificar fuentes fidedignas.
– En este sentido, resulta clave el trabajo de campo de los informadores y reporteros propios de los medios, así como la creación de secciones de “Fakt Checking” de verificación con herramientas específicas y periodistas especializados en dicha tarea.
– Por ello, se insta a los medios de comunicación informativos de la Unión Europea y de América Latina Caribe, a fomentar la formación profesional de verificación de fuentes noticiosas.
– Se solicita la colaboración de las Instituciones Europeas y de los Gobiernos de sus Estados miembros y de América Latina Caribe para la publicación basada en la transparencia y mediante sistemas de fácil accesibilidad de la información pública. Asimismo, se recomienda a los poderes públicos la denuncia sistematizada de la difusión de noticias falsas de las que tenga conocimiento fehaciente.
– La confluencia de la difusión masiva de la desinformación (falsedad, mentira y calumnia), potenciada por los súper poderes digitales, y el uso interesado que hacen de ella los poderes y fuerzas autoritarios con el fin de manipular voluntades de los ciudadanos, constituye un atentado al corazón mismo de la “res publica” y la democracia liberal basada en la separación de poderes con su sistema de contrafuertes (cheques and balances) de la que la prensa y expresión libres en defensa del derecho a la información veraz, son un pilar esencial. Por lo tanto, una acción combinada de comprobación de los hechos (fact checking, veracidad) por parte de los medios libres y la regulación de las grandes plataformas por organismos nacionales u supranacionales (UE) es una legítima autodefensa de la democracia liberal contra la amenaza autoritaria.
7. EL COPYRIGHT DE LA INFORMACIÓN.
– Se considera objetivo absolutamente imprescindible e irrenunciable para garantizar la sostenibilidad de los medios de comunicación informativos y con ello del derecho a la información y de la libertad de expresión, la defensa de los derechos de autoría individual y corporativa de la información.
– En esta línea, se estima un modelo extensible a la legislación de los Estados de América Latina Caribe la DIRECTIVA (UE) 2019/ DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO sobre los derechos de autor y derechos afines en el Mercado Único digital.
– Se insta a las asociaciones de Editores y de profesionales de la información de la Unión Europea y de la comunidad CELAC a intensificar sus acciones de influencia sobre los legisladores para introducir mecanismos legales de defensa para el pago de los derechos de autoría de la información, frente a las prácticas abusivas llevadas a cabo por algunos agregadores digitales de información.
– Como alternativa a estas prácticas de abuso de posición dominante, se consideran fundamentales las iniciativas de creación de nuevos modelos de negocio y agregación de contenidos que generan tráfico digital de visitas hacia los medios de comunicación informativos, regidos bajo el principio de pago de los derechos de autoría de la información.
– Las empresas tecnológicas han de pagar derechos de autor, y contribuir a la difusión libre de los medios de comunicación en competencia, sin interferir en sus contenidos, ni utilizar datos personales o generales de sus audiencias.
8. LA NECESIDAD DE LA FORMACIÓN CONTÍNUA.
– La responsabilidad del periodista y la trascendencia de su cometido exigen su formación exigente y continuada, en un ejercicio singular de dignidad y grandeza. La especialización ha de cooperar a la excelencia en la opinión y la información.
– Se pide el impulso de la formación y el intercambio de conocimientos entre profesionales de los diferentes países. Singularmente ha de fomentarse la compatibilidad y actualización de los programas de estudios de las diferentes facultades ligadas al mundo informativo y de la comunicación.
– Se considera de trascendencia crítica incrementar la audiencia de los jóvenes de los medios de comunicación informativos para garantizar el futuro del derecho a la información y la libertad de expresión.
– Para ello se recomienda el análisis de las nuevas temáticas de interés para los jóvenes y su incorporación a la agenda informativa prioritaria.
– Asimismo, consideramos conveniente la adaptación de los medios de comunicación informativos a los formatos digitales y audiovisuales de uso frecuente por parte de los jóvenes, así como la participación intensa de dichos medios en las Redes Sociales, y la incorporación de un lenguaje más cercano al de las audiencias juveniles.
– Uno de los factores que resulta imprescindible para la adecuación de los medios a los intereses juveniles tiene que ver con la incorporación de periodistas jóvenes a las redacciones. La conexión sociedad-medio es la única manera de no perder la utilidad de la información.
9. POLÍTICA DE ALIANZAS ENTRE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN.
– Se piden apoyos para que la industria de la comunicación pueda seguir una política de alianzas en la consolidación de un auténtico espacio de la comunicación en el área Europa-América Latina Caribe, con consecuencias directas sobre la producción, la formación, la difusión, el intercambio de productos, servicios, y la colaboración científica y tecnológica. Así como la puesta en marcha de estrategias que permitan reforzar la presencia de los productos del área de los mercados globales, implementando sistemas de ventas y comercialización conjuntos y asegurando el acceso a los planes de desarrollo y participación financiera internacional.
10. INFORMAR, FORMAR Y ENTRETENER.
– Los periodistas tenemos que seguir contribuyendo eficazmente en la construcción de un mundo mejor informado, más formado y sanamente entretenido; todo ello en la aspiración de la paz, la convivencia y la generosidad que supongan estos tiempos y el porvenir. No hay herramienta más útil que la palabra.