Muere Pilar Sanjurjo, la primera mujer del tiempo de Televisión Española

por Redacción
  • Después de pasar por televisión, trabajó en el Instituto Nacional de Meteorología hasta su jubilación, a mediados de la década de 2000.

Televisión Española está de luto: la meteoróloga de origen gallego Pilar Sanjurjo ha fallecido, según ha informado el ente a través de sus redes sociales. Pilar fue una pionera dentro de la pequeña pantalla, pues fue la primera mujer encargada de ofrecer la información del tiempo, labor que desempeñó durante los años 70 y 80, principalmente en los informativos de la noche en La 2.

Tal como apuntó TVE, Sanjurjo pertenece a la generación primigenia de presentadores del tiempo, como Mariano Medina y Eugenio Martín Rubio, quienes “ayudaron a que los espectadores entendieran mejor los fenómenos atmosféricos”. Durante sus primeros años como comunicadora, Sanjurjo tenía que explicar a la audiencia el tiempo que se esperaba en los días venideros con una pizarra con el mapa de España como soporte, donde se dibujaban los fenómenos a mano y se pegaban cartulinas para destacar las condiciones de cada comunidad autónoma.

“Me llevó a RTVE Eugenio Martín Rubio, protagonista de haberse jugado el bigote con una predicción de nieve que hizo en televisión. Al día siguiente, apareció ante las cámaras sin bigote; una persona polifacética y divertida a la que tengo afecto y simpatía. Ambos trabajábamos en el Instituto Nacional de Meteorología y me propuso sustituirle en TVE durante sus vacaciones”, recordó en una entrevista, sobre su desembarco en televisión.

Su primer acercamiento al mundo de la meteorología fue gracias a unas clases impartidas por Francisco Moran en su cátedra de la Universidad Complutense de Madrid. Luego consiguió ganar una oposición al Cuerpo Facultativo de Meteorólogos, ahora denominado Cuerpo de Meteorólogos del Estado. “Mi compañera Dolores Parra y yo fuimos las primeras mujeres después de la Guerra Civil que accedimos por oposición libre a este Cuerpo”, recordaba. Su primer destino la llevó a la oficina meteorológica del aeropuerto de Barcelona.

Luego se especializaría en predicción marítima y fue una de las primeras mujeres en participar en una expedición a la Antártida. Allí estudió los efectos del agujero de la capa de ozono. A mediados de los 80 tuvo que abandonar TVE, por la ley de incompatibilidades en el trabajo, y ella optó seguir trabajando en el INM -desde 2008 Agencia Estatal de Meteorología, AEMET,- donde ejerció de jefa de turno del Centro Nacional de Predicción hasta su jubilación, a mediados de la década de 2000.

Fuente: El Español

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